Luciana Geuna contó el problema de salud que tuvo y el infierno que sufrió

La repentina ausencia de Luciana Geuna en los programas de televisión y radio en los que participa encendió las alarmas entre sus colegas y seguidores. Tras varios días de silencio, la conductora volvió a su lugar en Olga y reveló que debió ser internada de urgencia por un problema de salud que la tomó completamente desprevenida.

Durante su relato, la periodista no dudó en describir lo que vivió con lujo de detalles. “Hace unos cinco o seis meses comencé a tomar pastillas anticonceptivas, conversado con mi ginecóloga. Hace dos o tres meses empezaron a generarme hemorragias, algo que parecía normal. Pero el lunes pasado por la noche empecé a sentir algo extraño y el martes fuimos a la guardia porque me asusté”, confesó frente al micrófono.

La situación fue escalando con el correr de los días. “Yo tenía buena reserva de hierro y me dieron una medicación, pero no funcionaba. El miércoles era un desastre, el jueves fue peor y ahí me dejaron en observación cuatro horas. Habían bajado un tercio los glóbulos rojos”, recordó Luciana con crudeza, dejando en claro lo delicado del cuadro.

El momento más crítico ocurrió en plena internación. “Era un sangrado sin pausa, algo que no paraba por días. Yo me mantenía tranquila, pero el sábado me descompuse. El domingo, de repente, la medicación hizo efecto y finalmente dejó de sangrar. No se puede explicar lo que fueron tantos días así. El lunes, cuando volví a casa, no podía caminar, y recién el viernes volví a ser yo”, relató Geuna, visiblemente conmovida.

LA SALUD DE LUCIANA GEUNA

El mundo del espectáculo no tardó en hacerse eco. Figuras como Fer Dente, Sergio Lapegüe, Verónica Lozano y Diego Leuco le enviaron mensajes de aliento. Desde Olga, sus compañeros hasta se animaron a imitarla en el estudio para sentir su presencia. Un gesto que demuestra cuánto se sintió su ausencia.

Finalmente, Luciana Geuna agradeció a quienes la acompañaron en este duro trance. En Instagram escribió: “Saliendo de un susto grande, de esos que te recuerdan lo intempestiva que puede ser la vida. Lo que todo cambia en un segundo”.